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¿Cuántas variedades de horchata existen en el mercado?
La horchata es una bebida refrescante que con su sabor y sus múltiples propiedades ya ha conquistado muchos hogares de España. Es debido a la gran demanda que existe en el mercado actual, que la podemos encontrar en muchos puntos de venta como son los supermercados o grandes superficies.
¿Pero sabes las diferencias entre los diferentes tipos de horchata cuando vas a comprar a un supermercado?
Desde MGO te explicamos en este artículo las principales características y diferencias entre sí de cada uno de los tipos existentes:
Es la que ves de forma más habitual en todos los supermercados. Esta horchata es la que está lista para beber en envases de tetrabrik o en botella de plástico.
Para ello, esta horchata pasa por un tratamiento térmico llamado ultrapasteurización, por eso lleva la coletilla de UHT (Ultra Hight Temperature). Este proceso junto con un envasado aséptico permite reducir los microorganismos y alargar la caducidad del producto hasta seis meses o más. Inevitablemente tras este proceso se pierde sabor y algunas propiedades como por ejemplo, el almidón, que aporta energía saludable y propiedades digestivas.
Es la que vemos envasada en botellas de cristal y está ubicada en los refrigeradores de algunos supermercados o grandes superficies. Que esté en nevera no debe llevarnos a pensar que sea natural o recién extraída, es fresca porque está en la nevera.
En ocasiones lleva a confusión por la poca claridad de los términos pero nunca podrá ser horchata natural porque ésta pasa por un proceso de pasteurización, perdiendo también algo de sabor y propiedades, aunque en menor medida que la UHT al tratarse de un proceso térmico más ligero.
Estos tipos de horchatas no son las más comunes en el mercado, ya que van destinadas en su mayoría al cliente profesional del canal HORECA, no obstante es una alternativa existente. La podemos encontrar generalmente en tetrabrick, en el caso de la condensada o en botella de cristal envasada al vacío para la horchata concentrada.
Tanto en la horchata concentrada como en la condensada, se elimina gran cantidad de agua para conseguir la concentración deseada, de esta forma realizando una pasteurización se consigue la conservación del producto con el sabor y propiedades más similares a la de la horchata natural.
La diferencia entre ambos tipos de horchata reside en la cantidad de chufas empleadas para su elaboración. En el caso de la concentrada se añaden más de un 50% de chufas y en la horchata condensada es más de un 25% de chufas. Es por tanto la concentrada la que se elabora con mayor cantidad de chufas, aportando un índice mayor de materia grasa “buena” y tan solo unas calorías más.
Esta horchata no está preparada para beber directamente, se ha de hacer una mezcla en casa con una parte de horchata y cuatro partes de agua, agitar, guardar en la nevera y servir. Otra característica de esta horchata es que nos permite sustituir la leche condensada en café, en postres, bizcochos… y hacerlos 100% vegetales.
La horchata de chufa natural, tal y como se conoce desde el origen, la típica de las horchaterías, es la que se elabora diariamente, de forma artesanal y con tan solo agua, chufas y azúcar. Sin añadir ningún aditivo ni proceso de tecnológico.
La horchata natural la puedes tomar en horchaterías, cafeterías-pastelerías, terrazas…
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